REDACCIÓN. (AFP) Aunque con más sudores de los previstos, el Barcelona cumplió su doble objetivo este sábado en su visita al colista y ya descendido Valladolid: Ganó (2-1) para mantener a raya al Real Madrid (2º) y dosificó a sus piezas clave para la vuelta de semifinales de Champions.
Tras su duelo de la 34ª jornada de LaLiga, los azulgranas cuentan con siete puntos sobre los blancos. El cuadro ‘merengue’ recibe el domingo al Celta (7º), antes del Clásico de la próxima semana en Montjuic, casi una ‘final’ por el título.
La noche en Pucela no fue un paseo para el Barça. Su arquero Marc-André Ter Stegen, de regreso al equipo titular después de 222 días de baja por una grave lesión en su rodilla derecha, encajó un gol en el primer tiro de recibió.
Iván Sánchez (minuto 6) probó suerte con un disparo en el que un rechace provocó un enorme bote del balón para superar por alto al capitán azulgrana.
Cumplió el Barcelona
Raphinha, que entró en la segunda parte, igualó con un disparo cruzado (54) y Fermín (60) completó la remontada.
“Tenía muchísimas ganas de jugar este partido. Mejor siempre con victoria. Seguimos con la misma dinámica que era importante”, dijo Ter Stegen, que en Champions devolverá la portería a Wojciech Szczęsny.
Hansi Flick, el técnico azulgrana, había salido con un once repleto de novedades respecto al 3-3 del miércoles en semifinales de la Champions League ante el Inter, pensando en la vuelta del martes en Milán.