Redacción. En el marco de la celebración del Día del Trabajador los capitalinos disfrutraron, este lunes, de una velada boxística de exhibición en la Plaza Central.
Los jóvenes que entrenan en el gimnasio número 3 de la Villa Olímpica con el ex boxeador Julián Solís, improvisaron un cuadrilátero para las peleas.
La presencia de los pugilistas despertó el interés de los amantes de este deporte que en todo momento apoyaron al niño y joven de su simpatía.
Por más de tres horas las personas que visitaron el Parque Central pudieron aplaudir los ganchos, japs, movimientos de cinturas y cabeceo que aplicaron los atletas en contienda.
Diferentes estilos
En cada una de las peleas se vieron disferentes estilos de boxeo, unos mostraron que poseen una mano pesada capaz de noquear y otros son fajadores.
Además, para garantizar la seguridad y la salud de los boxeadores, los organizadores ofrecieron protectores de cabeza y sus respectivos guantes.
Para los competidores no había un premio específico, sino la satisfacción de poder mostrar los avances en la disciplina de las “narices chatas y orejas de coliflor”.
Varios de estos jóvenes entrenan con disciplina para poder adquirir el mejor nivel y en un futuro poder defender los colores patrios en competencias internacionales.
Sus “espejos”
La mayoría de los prospectos del pugilismo hondureño miran como ejemplo a seguir a boxeadores catrachos de la talla de Gerardo “Chocolate” Sánchez.
También mencionan al Erick “El Terrible” Arzú que se prepera en Nicaragua, pero pelea bajo la bandera de Honduras.
Asimismo, Josec “Escorpión” Ruiz que está peleando en los Estados Unidos, pero siempre defendiendo los colores patrios.
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