Redacción (AFP). Más apretado que nunca, el Mundial de MotoGP, entra en su recta final con el Gran Premio de Indonesia este fin de semana, en el que el líder Francesco Bagnaia (Ducati) y el aspirante Jorge Martín (Ducati-Pramac) protagonizarán una nueva batalla por el título.
El italiano, vigente campeón del mundo, ha visto cómo su ventaja al frente de la clasificación se ha fundido como la nieve y sólo está tres puntos por encima de su rival español antes de la carrera en el circuito de Mandalika, 15ª carrera de un campeonato programado a 20.
“Mi enfoque sigue siendo el mismo: mantenerme concentrado y dar lo mejor de mí para obtener el mejor resultado posible”, declaró el turinés.
Luego agregó: “El clima es incierto, pero estoy convencido de poder hacerlo bien, independientemente de las condiciones”.
Competencia hasta el final
Martín se ha metido en la pelea por la corona tras vencer en dos de las tres últimas carreras y en los tres últimos sprints y tratará de mantener este impulso en la isla de Lombok, de donde podría salir como líder del campeonato por primera vez esta temporada.
“Voy a seguir con la mentalidad de trabajar día a día”, señaló el español.
También expresó: “Estoy muy cerca (de Bagnaia), ahora empieza un Mundial de seis carreras, pero la mentalidad es la misma: ser competitivo y ganar”.
Márquez se marcha a Ducati
En la carrera por el título, la principal incógnita es la participación en Mandalika del italiano Marco Bezzecchi (Ducati-VR46), tercero en el Mundial a 54 y 51 puntos respectivamente de Bagnaia y Martín, operado el pasado domingo de una fractura en la clavícula derecha, aunque tratará de correr.
Los españoles Álex Márquez (Ducati-Gresini), que se rompió tres costillas en India, y Álex Rins (Honda-LCR), que sufrió una fractura de tibia y peroné en su pierna derecha a comienzos de junio, están confirmados para esta carrera.
El fin de semana también está marcado por el anuncio este jueves de que el hexacampeón del mundo de MotoGP Marc Márquez correrá a partir de la próxima temporada junto a su hermano Álex en el equipo Ducati-Gresini.
“Necesito un nuevo desafío”, declaró el catalán de 30 años para explicar su fichaje por Ducati y abandonar Honda, marca con la que logró todos sus títulos en la máxima categoría del motociclismo mundial y de la se separó recientemente tras once años de colaboración.
Determinación de Márquez
En conferencia de prensa este jueves en Mandalika, Márquez explicó su decisión de unirse al equipo Gresini: “Es una gran familia y tiene la mejor moto de la parrilla. Y mi hermano está ahí”.
Desde que se cayó en Jerez en 2020, el mayor de los hermanos Márquez ha vivido un calvario de pasos por quirófano, caídas, lesiones y problemas físicos, que junto a la bajada de rendimiento de las Honda, le han impedido volver a pelear por el título.
En el campeonato del mundo de pilotos, Marc Márquez es actualmente 15º, con sólo 64 puntos, muy lejos del líder italiano Francesco Bagnaia (319 pts).
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