Redacción (AFP). España, herida por el 4-0 que le propinó Japón, enfrentará el sábado a Suiza en el primer partido de octavos de final.
Las españolas tendrán la presión de ganar para continuar con vida en el Mundial femenino.
España, que llegó con aires de favoritismo al Mundial de Australia y Nueva Zelanda, se medirán a Suiza en el Eden Park de Auckland.
El mismo día se enfrentarán Japón y Noruega en Wellington.
Las españolas, que arrancaron con triunfos contundentes contra Costa Rica (3-0) y Zambia (5-0), no pudieron con el juego de paciencia y rompimiento rápido de Japón, que la cargó de goles en el último duelo del Grupo C.
A despejar dudas
La paliza ante Japón puso en duda la capacidad de España y sus estrellas, como Alexia Putellas y Aitana Bonmatí, de alcanzar las etapas finales del Mundial.
Pero el técnico español, Jorge Vilda, aseguró que su equipo mostrará una actitud distinta a la que exhibió ante Japón.
“El equipo va a estar más unido que nunca, la frustración, la rabia que sienten (las jugadoras) la van a usar para el próximo partido y eso es lo que necesitamos frente a Suiza”, declaró Vilda.
“La actitud ante Suiza va a ser distinta. Esto lo tenemos que revertir, estoy seguro que lo vamos a hacer”, expresó el técnico español.
Líder impensable
Suiza fue el mejor equipo del Grupo A, superando a Noruega y a las locales Nueva Zelanda, por lo que el partido se prevé complicado para las hispanas.
En el segundo duelo de los octavos de final se enfrentan Japón, convertido en aspirante al título por la precisión táctica mostrada en la fase de grupos, y Noruega, un equipo que comenzó titubeante y terminó goleando 6-0 a Filipinas para asegurar su cupo en la segunda ronda.
Japón, que acostumbra ceder el balón y la iniciativa de ataque al rival, terminó la fase de grupos con 11 goles anotados y ninguno en contra en tres partidos.
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