Redacción. A las puertas del adiós de los mundiales, Qatar le ha caído como anillo al dedo a Lionel Messi que está a horas de poderse coronar con Argentina campeón del mundo.
Los medios de comunicación destacan que la actuación de “La Pulga” es de las mejores que se recuerden en las últimas citas mundialistas.
Destacan que el impacto de Messi en el juego de la Selección Argentina es absoluto. Cinco goles y tres asistencias para liderar al equipo a su sexta final y segunda del rosarino.
En su quinto Mundial, casi la mitad de los goles totales que lleva en el torneo (11), los ha hecho en Qatar 2022.
Pero lo que más sorprende es su transformación en las fases de eliminación, en donde dio un salto definitivo durante este certamen.
Messi lo disfruta
Antes de Qatar 2022, Messi nunca había marcado en fases de eliminación del torneo. Eran siete partidos desde Alemania 2006 hasta Rusia 2018.
Pero en este Mundial todo cambió. Ante Australia rompió su sequía, con el gol de penal que significó el 1-0.
Finalmente Leo se sacaba la espina y demostró que estaba dispuesto a darlo todo para llevar el equipo a su tercer Mundial.
Contra Países Bajos (Holanda) en los cuartos de final repitió. Otra vez desde los once pasos anotaba su cuarto gol del torneo y puso a Argentina 2-0 arriba.
El equipo sufrió hasta el final y necesitó de la definición de penales para seguir avanzando. Aunque no cuenta como oficial, en ese momento Messi tampoco falló.
Aquellas críticas de que no era un jugador determinante en los mundiales fue quedando obsoleta.
Pero si fuera poco, en las semifinales volvió a aparecer. Como viene siendo la norma, también marcó de penal.
Fue el gol que le dio aire a Argentina y que fue el precedente del 3-0 final contra Croacia.
Leo culminó su obra de arte con la asistencia a Julián Álvarez para el último tanto. Bailó a quien para muchos ha sido el mejor central del Mundial, Gvardiol.
Para la historia
La producción de la pulga en Qatar 2022 es una que quedará para la historia. Ha marcado en cinco de los seis partidos disputados (no marcó contra Polonia).
Pero no solo es cuestión de goles. También lleva tres asistencias. Leo se está posicionando fuertemente para ganar otra vez el MVP del torneo, tal como lo hizo en el 2014.
Aunque claro está que en esta oportunidad quiere que la suerte del equipo sea distinta. Por su desempeño ha sido elegido hasta en cuatro oportunidades MVP del partido.
Es la mayor cantidad en una sola edición, igualando su propia gesta en 2014 y también la del neerlandés Wesley Sneijder en 2010.
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