Redacción (AFP). Las autoridades españolas detuvieron a cuatro personas como presuntos responsables de lanzar una campaña de odio con mensajes principalmente racistas, dirigida contra el atacante del Real Madrid Vinicius Jr antes del pasado derbi contra el Atlético de Madrid, informó este jueves la Policía Nacional.
“Los arrestados son los principales responsables de la campaña de odio que se produjo en redes sociales contra un jugador del equipo contrario en vísperas del derbi madrileño del pasado mes de septiembre”, afirmó la Policía Nacional en un comunicado donde no nombra directamente al delantero brasileño.
Los cuatro detenidos, según los agentes, “incitaban a los aficionados a que asistiesen al estadio a proferir insultos vejatorios y discriminatorios con connotaciones racistas” hacia el jugador, a través de esta campaña que logró viralizarse “suscitando una importante alarma social”, explicaron.
La campaña en el foco es la conocida como #metropolitanoconmascarillas, tras la que algunos internautas animaban a que aficionados del Atlético de Madrid, que jugaba como local, acudían al estadio Metropolitano a proferir insultos y vejaciones principalmente contra la estrella del Real Madrid Vinicius Junior, durante el derbi del 29 de septiembre.
Modo de operar
Para hacerlo, les pedían que fueran con mascarilla para dificultar su posible identificación por parte de la policía.
Poco después, la Liga Profesional de Fútbol interpuso varias denuncias que dieron inicio a las pesquisas de la policía para identificar a los impulsores de la campaña.
Finalmente, los agentes detuvieron el 14 y 15 de octubre a cuatro varones “como presuntos responsables de un delito de incitación al odio”, aunque la investigación continúa abierta, señaló.
Aquel tenso encuentro entre los dos grandes clubes madrileños por la octava jornada de la Liga española -que finalizó 1-1- estuvo marcado por el lanzamiento de objetos en el estadio Metropolitano, especialmente a la portería defendida por el arquero blanco Thibaut Courtois, que hicieron al árbitro interrumpirlo diez minutos.
Por otro lado, los casos de racismo son frecuentes desde hace varias décadas en los estadios de fútbol en España.
Varios aficionados han recibido condenas penales en los últimos meses por insultos racistas recibidos por jugadores, principalmente Vinicius Junior, víctima de numerosos incidentes del mismo tipo desde su llegada a España en 2018.
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