Redacción. El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, demuestra que es un aficionado a todos los deportes y anunció que estará en el Super Bowl del próximo domingo, donde se enfrentan los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles.
Trump será el primer mandatario estadounidense en funciones que estará en un Super Bowl y donde mira favoritos a los Chiefs.
Recientemente, Trump estuvo presente en una velada de las Artes Marciales Mixtas, donde fue acompañado por varios de sus funcionarios.
Como todo se maneja en secretividad, se filtró que Donald Trump planea asistir al evento deportivo anual más grande de los Estados Unidos.
Trump, de 78 años, sería acompañado en el Caesars Superdome por el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson.
Además, la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, según lo confirmaron a The Post fuentes familiarizadas con la planificación.
Tiene su favorito
En la Oficina Oval, Trump no quiso decir abiertamente que le va a los Chefs, pero con la respuesta lo dejó claro.
“No quiero decirlo, pero hay cierto mariscal de campo que parece ser un buen ganador”, expresó Trump haciendo referencia a Patrick Mahomes de los Chiefs.
La presencia de Trump en el Super Bowl requerirá de mayor seguridad en Nueva Orleans, pues el juego decisivo se realizará 39 días después de que un terrorista inspirado por ISIS condujera un camión contra multitudes que celebraban la víspera de Año Nuevo en Bourbon Street, matando a 14 personas e hiriendo a docenas más.
El ambiente se podría poner incómodo en el Caesars Superdome, pues también estará la superestrella del pop Taylor Swift, pareja del ala cerrada de los Chiefs, quien instó a los votantes a rechazar a Trump en noviembre pasado.
Asistencia de presidente y vicepresidentes
El New York Post destaca que cuatro vicepresidentes en funciones han asistido al Super Bowl.
En 1971, Spiro Agnew, un fanático devoto de los Baltimore Colts, vio a su equipo vencer a los Dallas Cowboys por 16-13 en el Orange Bowl en Miami.
Además, once años después, el entonces vicepresidente George HW Bush vio a los 49ers de San Francisco ganar su primer Super Bowl, 26-21, sobre los Bengals de Cincinnati en el Silverdome en Pontiac, Michigan.
En 1994, Al Gore estuvo en el Georgia Dome de Atlanta para ver a los Dallas Cowboys condenar a los Buffalo Bills a su cuarta derrota consecutiva en el Super Bowl, 30-13.
Bush asistió a un Super Bowl como expresidente, participando en el lanzamiento de moneda junto con la leyenda de los Cowboys Roger Staubach antes de la sorprendente victoria de los Patriots sobre los grandes favoritos St. Louis Rams en el Super Bowl XXXVI.508
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