REDACCIÓN.- El Arsenal comienza la temporada con un título. Los de Mikel Arteta lo tenían todo perdido ante el Manchester City, en la final de la Community Shiled, pero en el último minuto, Akanji se metió el balón en propia puerta.
La final se fue a los penaltis y los “Gunners” arrebataron el título a un Pep Guardiola que no podrá lograr el histórico sextete.
Community Shield winners for a 17th time ❤️ pic.twitter.com/YHXMcMsiai
— Arsenal (@Arsenal) August 6, 2023
Los Citizens comenzaron fuerte
El partido comenzó como era de esperar. Con un gran dominio en la posesión por parte de los jugadores de Pep Guardiola. Con una única cara nueve en su once, el de Mateo Kovacic acompañando a Rodrigo en el centro del campo para sustituir a Gündogan.
Durante este demoledor inicio en la posesión del conjunto citizen, el Arsenal se ceñía única y exclusivamente a defender, con un esquema muy sólido y manteniendo el centro del campo muy unido sin permitir los pases interiores de los jugadores Sky Blues.
Pero fue nada más cumplirse el ecuador de la primera mitad cuando se produjo un giro drástico en el guión del partido. Los de Mikel Arteta se quitaron los nervios, se desperezaron y comenzaron a quitarle la posesión a su rival, hasta el punto de tener las ocasiones más claras de la primera mitad.
De hecho, el jugador más importante del Manchester City acabó siendo su portero, Stefan Ortega (suplente de Ederson). El guardameta de origen español alemán salvó a su equipo con una parada a bocajarro de Havertz. Antes, el ex del Chelsea también la tuvo, pero el portero del City volvió a ser decisivo y mantener la final en tablas.
Haaland disminuido
El partido, contra todo pronóstico, estuvo marcado por la ausencia de Haaland. El delantero noruego, que impuso su ley la pasada temporada en la Premier League, estuvo completamente desaparecido en los 64 minutos que estuvo sobre el terreno de juego. No tuvo ocasiones, apenas tocó la pelota, pero nadie duda que volverá a marcar los goles a pares en cuanto de comienzo la competición liguera.
Sin embargo, cuando todo hacía indicar que la final se iría a los penaltis (no había prórroga), llegó el joven Cole Palmer en el minuto 77 para que, desde el costado derecho del balcón del área, anotara un magnífico gol con su pierna izquierda para hacer imposible la estirada de Ramsdale.
El Arsenal lo intentó en los últimos minutos del partido, pero el Manchester City supo manejar a su antojo el resultado. Los de Pep Guardiola estaban a punto de levantar el trofeo cuando en el añadido del añadido, en el minuto 90+11, Akanji, tras un disparo de Trossard a la desesperada, se metió el balón en propia puerta para enviar la final a los penaltis.
Un City muy fallón
El primer penalti de la tanda lo anotó Odegaard. En el Manchester City, fue De Bruyne el que asumió la responsabilidad de la primera pena máxima, peor envió el balón al larguero.
Después fue turno de Trossard, que puso el 2-0 para el Arsenal metiendo mucha presión a los de Guardiola. El siguiente para el conjunto citizen fue Bernardo Silva, que no falló en su turno y recortó distancias. (2-1).
Asimismo, Bukayo Saka puso el 3-1 y el City estaba contra las cuerdas. Y la estocada final fue cuando Rodrigo falló su penalti. Ramsdale adivinó el lado y paró la pena máxima del español. Y fue Fabio Vieira quien le dio el título al Arsenal con un golazo por la escuadra.
De esta forma, el Arsenal gana la 17 Community Shiled en su historia, y el tercer trofeo de Mikel Arteta desde que se unió a los londinenses en 2019.
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