Redacción (AFP). El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha vuelto a jugar al golf tras años de interrupción para causar una buena impresión en las futuras reuniones con su homólogo estadounidense, Donald Trump, anunciadas este miércoles en su oficina.
Yoon, un conservador de 63 años que lleva casi diez años sin practicar este deporte, decidió regresar al ‘verde’ después de que Trump fuera elegido para un segundo mandato, dijo la oficina presidencial.
“El presidente electo Trump ha jugado golf toda su vida y muestra excelentes habilidades” en ese deporte, dijo un portavoz presidencial.
“Para que las conversaciones se desarrollen sin problemas” con su homólogo, el gobierno surcoreano ha decidido que el presidente Yoon “debe golpear la pelota correctamente”, agregó.
Confía en llevarse bien con Trump
En una conferencia de prensa la semana pasada, Yoon predijo que “se llevaría bien” con Trump y señaló que ambos eran nuevos en política cuando llegaron al poder.
El gobierno surcoreano está preocupado por los planes de Trump de combatir el déficit comercial de Estados Unidos mediante aranceles aduaneros.
Asimismo, por su exigencia de que sus aliados en Asia pongan más dinero para financiar su protección militar.
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