Redacción (AFP). A la sombra de otras figuras durante mucho tiempo, Raphinha ha alcanzado la madurez a los 27 años, liderando a la selección de Brasil y a un Barcelona que se aferra a su zurda para paliar sus bajas en ataque.
Líder de la Liga, el Barcelona regresa tras la ventana internacional con una semana muy caliente: arranca recibiendo al Sevilla el domingo y repite en Champions ante el Bayern Múnich el miércoles.
A continuación, el plato fuerte, viajará a la capital española para disputar el clásico frente al Real Madrid el sábado 26 de octubre.
El equipo dirigido por Hansi Flick afronta los duelos diezmados en ataque: Robert Lewandowski volvió tocado del empate 3-3 de Polonia ante Croacia el martes.
Por su parte, Lamine Yamal abandonó la concentración española tras el primer duelo por una sobrecarga.
Ferran Torres estará varias semanas de baja por una lesión en el bíceps femoral y el mediapunta Dani Olmo ultima su recuperación de una dolencia similar.
Doblete con Brasil
Solo está al 100% Raphinha, autor de un doblete de penal el martes con Brasil para encarrilar la goleada 4-0 ante Perú en la clasificación sudamericana al Mundial 2026.
Sin los lesionados Neymar y Vinicius Jr, el zurdo técnico asumió el liderazgo de una selección que el Dorival Júnior intenta reflotar tras una crisis de juego y resultados.
Jugó como ’10’, puesto que también está ocupando con su club y que le permite tener más influencia en el juego.
“Fueron dos juegos que, en mi opinión, supimos controlar. Obviamente, estamos muy lejos de la perfección, pero estamos trabajando fuerte y vamos por el camino correcto”, apuntó Raphinha sobre una ventana internacional que Brasil comenzó con un triunfo 2-1 ante Chile.
Con su doblete, Raphinha alcanza los 9 tantos en 29 partidos como internacional.
“Llevarme bien con todo el mundo”
Con el Barcelona ha firmado seis goles y seis asistencias en 11 partidos, contando todas las competiciones, una versión eficaz muy lejana de la que mostró en sus dos primeras temporadas como azulgrana, con Xavi Hernández en el banquillo.
El jugador fue fichado tras brillar dos cursos en el Leeds en un traspaso de 65 millones de euros (71 millones de dólares).
“Estoy muy contento con él, es increíble lo que está haciendo”, señaló Flick tras una estelar actuación del jugador en el triunfo 3-0 ante el Alavés.
“Su dinámica es muy buena y pienso que lo puede hacer todavía mejor”, añadió el alemán, que ascendió a capitán al extremo.
“Haber sido elegido como capitán del Barcelona, también viene un poco por mi forma de ser”, señaló el jugador a Globo durante la ventana internacional.
Agregó que “viene de intentar llevarme bien con todo el mundo, con los jóvenes y los veteranos, intentando ayudar en el club, ya sea con jóvenes de la cantera o de otros lugares, intentando ayudar a que se adapten lo antes posible”.
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