Redacción (AFP). Los Minnesota Timberwolves sellaron su regreso a la final de la Conferencia Oeste de la NBA con un último triunfo 121-110 frente a los Golden State Warriors, mientras los Boston Celtics resistieron la primera oportunidad de clasificación de los New York Knicks.
Los Celtics, vigentes campeones, vencieron 127-102 a Nueva York y se acercaron 3-2 en el global de esta semifinal del Este.
En el Oeste, los Timberwolves finiquitaron por 4-1 la serie ante los Warriors, lastrados por la baja desde el partido inicial de su superestrella, Stephen Curry.
Julius Randle, con 29 puntos, y Anthony Edwards, con 22 tantos y 12 asistencias (su récord en playoffs), aseguraron la segunda presencia consecutiva de Minnesota en la final del Oeste, tras su derrota del año pasado frente a los Dallas Mavericks.
Espera rival
Su rival saldrá del enfrentamiento entre los Denver Nuggets y los Oklahoma City Thunder, que tienen una ventaja de 3-2.
Ante la resignada mirada de Curry en el banco, los Warriors dijeron adiós a otra frustrante temporada en la que clasificaron a playoffs en el repechaje.
Impulsado por la llegada en febrero de Jimmy Butler (17 puntos), Golden State salió airoso de una feroz primera ronda ante los jóvenes Houston Rockets.
Frente a Minnesota, los Warriors se aferraban a la posibilidad de que Curry, lesionado en los isquiotibiales, estuviera de vuelta para un eventual sexto partido el domingo, pero los Timberwolves evitaron ese escenario con la victoria definitiva ante su público.
No se puede hacer mucho con las lesiones
“Las lesiones forman parte de los playoffs. No quiero quitarle nada a Minnesota (…) Pero una vez que Steph quedó fuera, todo cambió para nuestro equipo”, reconoció Steve Kerr, entrenador de Golden State.
Con él “teníamos posibilidades, sé que podríamos haber llegado hasta el final”, dijo Kerr sobre el jugador con el que conquistó cuatro títulos de campeón en la última década.
Los Timberwolves tomaron el control del marcador desde el principio, explotando su superioridad física y acierto en el tiro exterior.
Minnesota dominaba por 25 puntos al final del tercer cuarto antes de que los Warriors hicieran un amago de remontada al acercarse a nueve a mitad del último periodo.
Frenando la rebelión
Edwards frenó la rebelión con un triple y los Timberwolves zanjaron el triunfo gracias a una gran actuación coral con hasta seis jugadores en dobles dígitos de anotación.
“Hemos tenido una temporada llena de adversidades, pero, como dijo el entrenador (Chris Finch) al final de la temporada regular, no vendimos ni despedimos a nadie”, dijo Randle sobre una decepcionante fase regular en la que concluyeron en el sexto lugar del Oeste.
“Simplemente, nos mantuvimos unidos y lo superamos juntos”, remarcó el pívot.
Por su lado, Anthony Edwards, artífice también de la victoria ante Lakers en primera ronda, se convirtió en el sexto jugador en la historia en anotar 1.000 puntos en playoffs antes de cumplir los 24 años, uniéndose a los astros Kobe Bryant, LeBron James, Kevin Durant, Jayson Tatum y Tony Parker.

Boston resurge sin Tatum
En el Este, los Boston Celtics vencieron por 127-102 a los New York Knicks en un duelo que estaban obligados a ganar para seguir con vida.
Los vigentes campeones, que jugaban su primer partido desde la grave lesión de su estrella, Jayson Tatum, evitaron despedirse de la temporada frente a sus aficionados y volverán a Nueva York este viernes para el sexto partido.
El ganador de esta eliminatoria enfrentará en la final del Este a los Indiana Pacers, que tumbaron a los Cleveland Cavaliers.
Con su equipo contra la pared, el base Derrick White (34 puntos) y el alero Jaylen Brown (26 tantos y 12 asistencias) tomaron el testigo de Tatum en el ataque de Boston.
Noche fantástica
“Esta noche fue fantástica. Jugamos como equipo, con contribuciones de todos”, dijo Brown antes de enviar un mensaje de apoyo a su socio Tatum. “Esta es para JT. Que te recuperes, hermano”.
Tatum, seis veces All-Star, se rompió el tendón de Aquiles derecho en el cuarto partido el lunes, un golpe casi definitivo para las aspiraciones de los Celtics de revalidar el título.
Tras una igualada primera parte, que concluyó con empate a 59, el duelo se decantó a favor de Boston en el tercer cuarto, con un arrebato de orgullo de sus figuras y la asfixiante atmósfera que crearon sus 20.000 aficionados.
Las esperanzas de otra milagrosa remontada de los Knicks se desvanecieron a falta de siete minutos para el final cuando su estrella, Jalen Brunson (22 puntos), fue expulsado por faltas personales.
Te puede interesar: El papa León XIV recibe en el Vaticano al tenista Jannik Sinner
Suscríbete gratis a más información en nuestro WhatsApp. Haga clic en el enlace: https://bit.ly/2Z2UF3