Redacción (AFP). El centrocampista internacional de Corea del Sur, Son Jun-ho, suspendido de por vida por la Federación China de Fútbol por presuntas apuestas ilegales y partidos amañados, clamó este miércoles su inocencia, acusando a China de chantaje.
El jugador de 32 años, que militaba en el Shandong Taishan de la liga china, regresó a su país el pasado mes de marzo después de haber estado detenido desde mayo de 2023.
“La policía china presentó unas acusaciones ridículas”, declaró entre lágrimas durante una conferencia de prensa, desmarcándose de cualquier tipo de participación en los hechos de los que fue acusado.
“Me amenazaron con detener a mi mujer si no reconocía los hechos y de llevarla al mismo centro de detención para ser interrogada”, prosiguió.
Agregó Son Jun-ho que también le mostraron fotos de sus hijos en su teléfono como medida de presión.
Se siente chantajeado
“No tuve otra opción que admitir unas acusaciones que ni siquiera comprendía, solo para regresar rápidamente cerca de mi familia”, concluyó.
Son Jun-ho es una de las 43 personas con la exclusión de por vida el martes por la Federación China de Fútbol.
Entre los expulsados están tres antiguos internacionales chinos.
En total, 128 personas están implicadas en esta investigación que dura desde hace dos años sobre apuestas ilegales.
Además, partidos amañados en el fútbol chino, según el ministerio de Seguridad pública chino, citado por la agencia oficial Xinhua.
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