Redacción (AFP). Lamine Yamal, que pese a su exhibición acabó enrabietado el miércoles después de que el Barcelona empatara a tres ante el Inter de Milán en la ida de semifinales de Champions en Montjuic, no solo aspira a meter a su equipo en la final, sino a coleccionar más récords en su ya extenso palmarés.
El Barcelona se encuentra ante una oportunidad que no se le presenta desde 2015: jugar el partido por el título de la máxima competición europea, que este año se celebrará en Múnich, el 31 de mayo.
Antes, para superar a los italianos, Hansi Flick se encomendará al canterano de 17 años, que fue la mayor pesadilla de la escuadra nerazzurra en feudo azulgrana.
Hasta el técnico italiano, Simone Inzaghi, reconoció que puso hasta tres marcadores para frenarlo.
Comprometido con el Barcelona
El despliegue físico y el talento exhibido sobre el césped en ese duelo demostraron una vez más el compromiso del extremo azulgrana por conquistar un título que al club se le resiste desde hace una década.
Ese ímpetu lo mostró incluso al término del choque: “Siempre he pensado que el triplete es posible, desde el principio de temporada. Confío en mis compañeros. Daremos todo y pasaremos”.
En caso de victoria, Yamal batiría otro récord de otros que ya ostenta.
Se convertiría en el más joven en disputar la final.
Por Kluivert
Hasta el momento, ese reconocimiento lo tiene Antonio Simoes del Benfica, que con 18 años y 139 días jugó y ganó la final de 1962 frente al Real Madrid (5-3).
Y llegado a la final, Yamal tendría la posibilidad de seguir batiendo récords de precocidad, ya que podría superar al neerlandés Patrick Kluivert como el goleador más joven en una final, que data de 1995 cuando el Ajax le ganó 1-0 al Milán, con un tanto del delantero, que entonces tenía 18 años y 327 días.
Incluso en el caso de alcanzar la final y perderla, Yamal sumaría otro récord el del también Kiki Musampa, como el ‘perdedor’ más joven, con 18 años y 307 días.
Su equipo, el Ajax, cayó en la tanda de penales ante la Juventus (4-2) tras empatar a uno en 1996.
Independientemente de lo que ocurra este martes, Yamal, que hasta el próximo 13 de julio no cumplirá 18 años, ya alcanzará récords.
Fue el futbolista más joven en debutar con el Barcelona (frente al Betis en abril de 2023), con 15 años y 291 días.
El 8 de octubre de 2023, pasó a ser el goleador más joven de la LaLiga al anotar marcar en el empate a 2-2 en Granada.
Titular más joven en Champions
Sin embargo, Yamal no es el más precoz en jugar un partido de la Liga de Campeones, récord que tiene Youssoufa Moukoko, del Borussia Dortmund, con 16 años y 18 días, aunque sí es el titular más joven, con 16 años y 83 días, cuando el Barcelona se impuso al Oporto (1-0) en octubre de 2023.
Tampoco es el goleador más joven del torneo, mérito que tiene su compañero en el Barcelona Ansu Fati, que con 17 años y 40 días, casi un mes más joven que cuando Lamine marcó en la derrota frente al Mónaco (2-1) en septiembre pasado (17 años y 68 días).
Más recientemente, se convirtió en el jugador más joven en anotar y dar una asistencia en un encuentro, con 17 años y 241 días.
Fue en la vuelta de octavos de esta temporada contra el Benfica.
Ese tanto, además, hizo que fuera el segundo goleador más joven de la fase eliminatoria de la Liga de Campeones, después de Bojan Krkić, que tenía 17 años y 217 días, cuando marcó para el Barcelona ante el Schalke el 1 de abril de 2008.
Para continuar ampliando su leyenda, Yamal podría estar acompañado por el polaco Robert Lewandowski, que entró en la convocatoria del Barcelona tras una lesión que lo dejó dos semanas fuera de los terrenos de juego, y contará con una Raphinha en estado de gracia.
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