SAN PEDRO SULA.- Desde horas tempranas los aficionados llenaron el estadio Morazán para presenciar el choque de vuelta entre Real España y Marathón.
Se pudo observar la algarabía y alegría que evidenciaron los hinchas aurinegros, en los momentos previos al partido. El distinto fue el color negro y amarillo, tal y como lo pidió la directiva del Real España; que sería uno de los requisitos para que las personas ingresarán al estadio.
De igual forma, la seguridad resguardó la integridad de los aficionados, aunado a las cámaras que se instalaron para evitar cualquier trifulca como sucedió en el último derbi sampedrano en el Morazán.
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